El tiempo primaveral que hemos "sufrido" en la recta final del invierno, y el estival que "disfrutamos" al comienzo de la primavera está siendo uno de los temas más destacados y habituales en las conversaciones de las últimas semanas. A nadie debe pasar desapercibido YA que los efectos del cambio climático están presentes, y muy presentes, en la actualidad.
Estas alteraciones climáticas han acelerado su ritmo en los últimos años provocando de manera peligrosa el aumento de los gases de efecto invernadero, la contaminación ambiental o la sobre explotación de los recursos naturales, entre otros. Esto se traduce en el aumento de la probabilidad de desastres naturales, como las inundaciones que cada vez son más frecuentes, aumento de la sequía y de la degradación de la tierra en general. A nadie debe sorprender los efectos que esta situación tiene en la salud de las personas y en el resto de seres vivos.
Acción local
Con este panorama, la labor de los gobiernos locales es clave para intentar aminorar este avance acelerado del cambio climático. Su aportación es fundamental al ser los encargados, entre otras muchas cuestiones, de la movilidad, la gestión de los residuos o la edificación.
Además, sin ellos por ejemplo, sería casi imposible la implementación de los ODS de la Agenda 2030 en el territorio al ser la administración local el nivel de gobierno capaz de traducir una agenda universal y amplia en políticas públicas concretas y tangibles.
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| Plan Municipal Contra el Cambio Climático de Benalmádena |
Clima y Salud
El cambio climático afecta a la salud pública desde diferentes vertientes:
- provoca un incremento de las enfermedades cardiovasculares
- se dan más casos de problemas respiratorios
- las variaciones estacionales pueden provocar efectos adversos en personas alérgicas o asmáticas.
- aumento de la mortalidad con las olas de calor
- contaminación del agua potable a causa de las inundaciones
- aumento de incendios forestales que causan víctimas mortales
- reducción de la capacidad productiva que desencadene problemas de malnutrición
Programa de Educación Ambiental de Casares
Las propuestas para avanzar en aminorar sus efectos pueden giran en torno a:
- utilizar la energía de modo que reduzca su contribución al cambio climático
- promover modos y medios de transporte que no contaminantes
- fomentar la prevención, reutilización y reciclado de residuos
- crear conductas que ayuden a la reducción de la huella de carbono
Clima y Urbanismo
El Plan Andaluz de Acción por el Clima, identifica el urbanismo y la ordenación del territorio como una de las áreas estratégicas más afectadas por la acción del cambio climático. Una medida de eficacia comprobada es la dotación de árboles y zonas verdes en espacios urbanos. Estos elementos contribuyen a la purificación del aire, además de ofrecer protección y favorecer la disminución de la temperatura con sus sombras.
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| Taller Medioambiental de Campillos |
Colocados de forma adecuada, en torno a los edificios, se llega a reducir las necesidades de aire acondicionado, por ejemplo. Además, según la Organización de las Naciones Unidad para la Alimentación y la Agricultura (FAO), colocar los árboles de manera estratégica en las ciudades puede bajar entre 2ºC y 8ºC la temperatura del aire.
Por ello, es fundamental tener en cuenta estas cuestiones a la hora de ordenar el territorio local y de diseñar nuevos espacios. Cuidemos el espacio que nos rodea para que el entorno nos cuide.
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