En esta semana, más concretamente el 15 de Junio, tiene lugar el "Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez", y en palabras del secretario general de la ONU, António Guterres...
“Ninguna persona, joven o vieja, es prescindible“
"Las personas de edad tienen los mismos derechos a la vida y a la salud que todos las demás, al adoptar decisiones difíciles respecto a la atención médica para salvar vidas, se deben respetar los derechos humanos y la dignidad de todos”.
Por tanto, el impacto en la salud y los servicios de atención a largo plazo para las personas mayores debe reconocer y enfrentar los desafíos particulares a los que se ven expuestos, incluida su capacidad para acceder a todos los servicios públicos de calidad.
El maltrato de las personas mayores es un problema social que existe en los países en desarrollo y desarrollados y, por lo general, no se notifica suficientemente en todo el mundo. Tan solo en unos pocos países desarrollados hay tasas de prevalencia o estimaciones, que se sitúan entre un 1% y un 10%. Aunque se desconoce la magnitud del maltrato de los ancianos, su importancia social y moral es indiscutible. Por este motivo, este problema requiere una respuesta mundial multifacética que se centre en la protección de los derechos de las personas de edad.
Las formas de definir, detectar y resolver el maltrato de las personas mayores tienen que enmarcarse en un contexto integral y considerarse junto con los factores de riesgo que tienen una especificidad sociocultural.
Progresivo envejecimiento de la población
El envejecimiento de la población está a punto de convertirse en una de las transformaciones sociales más significativas del siglo XXI, con consecuencias para casi todos los sectores de la sociedad, entre ellos, el mercado laboral y financiero y la demanda de bienes y servicios, para satisfacer las necesidades de la población en general, y más si cabe de una población en progresivo envejecimiento.
Por ello, la respuesta de la OMS, parte de la declaración del periodo 2021-2030 como la Década del Envejecimiento Saludable, un proyecto de colaboración a escala mundial que pretende aunar los esfuerzos de los gobiernos, la sociedad civil, los organismos internacionales, los profesionales, el mundo académico, los medios de comunicación y el sector privado para llevar a cabo una acción concertada, catalizadora y colaborativa a lo largo de 10 años orientada a promover vidas más largas y saludables.
La Década tiene en su base la Estrategia y Plan de Acción Mundiales de la OMS sobre el Envejecimiento y el Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento, y es un apoyo para el cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La Década del Envejecimiento Saludable (2021-2030) tiene como objetivo reducir las desigualdades en materia de salud y mejorar la vida de las personas mayores, sus familias y sus comunidades a través de la acción colectiva en cuatro esferas:
1. Cambiar nuestra forma de pensar, sentir y actuar en relación con la edad y el edadismo;
2. Desarrollar las comunidades de forma que se fomenten las capacidades de las personas mayores
3. Prestar servicios de atención integrada y atención primaria de salud centrados en la persona, que respondan a las necesidades de las personas mayores;
4. Proporcionar acceso a la asistencia a largo plazo a las personas mayores que la necesiten.
Para más información, se puede acceder al siguiente enlace:
https://acortar.link/Giqx4x
RELAS y personas mayores
Desde la Red de Acción Local en Salud en Andalucía de alguna manera u otra, se aborda el maltrato hacia las personas mayores, desde un enfoque positivo, tal y como, se presenta el título de este post, se pretende abordar el buen trato a las personas mayores, y ¿de qué manera lo hemos ido abordando?
1. Guía de Salud Pública (vol.7): Violencia contra las personas en situación de vulnerabilidad
Este documento forma parte de una serie de informes sobre Salud Pública que hemos llamado “Guías para el abordaje de temas de Salud Pública en el ámbito local”. Todos ellos están elaborados por el equipo RELAS y han sido revisados por personas expertas en cada uno de los temas. Están basados en la mejor y más actualizada “evidencia” y en las recomendaciones de las instituciones públicas más relevantes. Se ha pretendido que sean documentos de lectura fácil y lo más breves posible.
Su finalidad es orientar a los municipios sobre Violencia contra personas en situación de vulnerabilidad (personas mayores y/o personas en situación de dependencia), aspectos clave a considerar para maximizar su impacto, recomendaciones para implementar las acciones más efectivas en el ámbito local, orientación sobre posibles objetivos a desarrollar y sus indicadores de evaluación. Todos incluyen recomendaciones bibliográficas fiables y actualizadas.
Celebramos en 2019, la quinta edición de nuestro Encuentro RELAS, dedicado a las personas mayores y el envejecimiento saludable, abordando aspectos claves como la participación, la promoción de hábitos saludables, la integración de las TIC´s en la vida diaria de las personas mayores, y sobre todo, el respeto hacia las mismas.
3. Acciones significativas Municipios RELAS Andalucía
Y por último, se muestran algunos ejemplos, de cómo se ha ido integrando, las acciones en los planes locales de salud, dirigidas a las personas mayores en los municipios adheridos a RELAS:
Cartel Semana de las Personas Mayores Nerja-Maro (Málaga) Octubre 2021
Sobre todo, tener en cuenta que la experiencia en estos y otros muchos municipios adheridos a RELAS en Andalucía, nos ha demostrado y evidenciado que las personas mayores son verdaderos activos en salud en la comunidad.
Coordinador Unidad de Acción Local en Salud Granada
Distrito Sanitario Granada-Metropolitano
@AndalucíaRelas
Muy interesante el artículo. Hace falta más testimonio de una realidad que queda oculta dentro de las paredes del hogar. Hay muchos casos de personas que en los últimos años de su vida, se ven solas y abandonadas, cuando no directamente son víctimas de malos tratos, vejaciones y desprecios. Vivimos en una sociedad que desprecia lo viejo, donde la juventud es un valor que cotiza al alza, y la experiencia de lo vivido no tiene ningún aprecio social.
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