Esta comunicación es un relato de mi experiencia y vivencias personales
en un momento en el que estoy participando activamente en la implantación y el
desarrollo del Plan Local de Salud en la ciudad de Cádiz. La sensación colectiva
que tenemos todas las personas implicadas en este proyecto se debe parecer
bastante a la euforia porque hemos conseguido hitos que en nuestros comienzos
allá por el año 2015 eran difíciles de concebir. Se ha logrado implicar a instituciones que históricamente han permanecido desconectadas entre sí y
además hemos logrado ilusionar a una parte importante del movimiento social de
la ciudad que en estos momentos trabajamos juntos, coordinados y con una
participación real, efectiva y del mismo nivel de responsabilidades y de
aportaciones.
Pareciera que a veces los sueños
pueden cumplirse. Y me explico;
Tras cursar mi licenciatura en Medicina mi decisión en cuanto a mi formación
como especialista estaba clara. Los tres últimos años de la carrera los aproveché
para trabajar como Alumno Interno y descubrí el ilusionante mundo hospitalario.
He vivido en primera persona el desarrollo que ha tenido este nivel
asistencial. La llegada del Servicio Andaluz de Salud supuso un antes y un después. En mi juventud, que te asistieran en un
hospital en Madrid o en Sevilla, en Sevilla o en Cádiz, en Cádiz o en algún
pueblo significaba una diferencia notable en cuanto a nivel técnico y, como
consecuencia, a las posibilidades de sobrevivir. A partir de entonces estas
diferencias no existen. El personal especialista que te atiende en cualquier
nivel procede de los mismos orígenes formativos y garantiza una asistencia de
la misma calidad. Equidad se llama.
La Atención Primaria no existía en el ideario colectivo. La Salud
Pública no sabíamos en qué consistía. A finales de la década de los setenta las
y los profesionales sanitarios estábamos desesperados. El caos organizativo era
límite, no existía una organización general de la Salud y de la atención a la
enfermedad. Sobrevivíamos como podíamos y nos organizamos. En el año 1981
constituimos la Federación deAsociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) para reclamar la existencia de
un Servicio Nacional de Salud, que se consiguió en el año 1986, que
posibilitara una atención universal, gratuita en el momento de la asistencia,
equitativa, con financiación y provisión públicas y de la máxima calidad.
Durante unos años vivimos esa realidad pero los recortes al sector público
desde el 2007 nos devolvió al desierto.
En el año 1983 organizamos el II
Congreso de la FADSP en Cádiz. Para muchas y muchos de nosotros fueron unas
jornadas que cambiaron nuestras vidas en cuanto a inquietudes profesionales.
Comprobamos con estupefacción que uno de los ponentes era un catedrático cubano
de Atención Primaria!!! y VicenteNavarro nos
dejó impactado cuando nos habló de la Salud Pública. Era descubrir un nuevo
mundo que ampliaba el de la pura asistencia a la enfermedad, que obviamente
tiene una gran importancia cuando se necesita.
Desde entonces -llevamos más de
tres décadas- nos comprometimos a defender el Sistema Sanitario Público sin
sectarismos ni corporativismos. Por cierto, en este largo recorrido nos hemos
encontrado en soledad en la mayoría de los períodos. Lo habitual ha sido defender
la parcela en la que trabajas, la profesión que desarrollas o incluso a los
trabajadores y trabajadoras, olvidando por completo que la ciudadanía es el
centro de la cuestión.
Desarrollando esta labor de
defensa del derecho a la Salud participamos en la constitución de la Plataforma Social de Cádiz que integró a muchos movimientos sociales y a partidos y sindicatos que
defendían los derechos sociales más elementales. Su recorrido fue muy
estimulante para recuperar la sensación de activismo social en la ciudad, en mi
opinión.
Llegamos al año 2015 y participamos en la gestación de un nuevo movimiento integrador con exactamente los mismos objetivos que la plataforma antes mencionada y se constituyó GanarCádiz en Común, una coalición de partidos, organizaciones sociales y personas a título individual con un imaginario colectivo de defensa de los derechos humanos. No sin intenso debate se decidió finalmente participar en las elecciones municipales de la ciudad de Cádiz. El resultado final de esta parte de la historia es que Ganemos Cádiz está cogobernando el Ayuntamiento en coalición con Por Cádiz Sí Se Puede.
En el programa con el que nos
presentamos a dichas elecciones había un punto indiscutible. Elaborar,
implantar y desarrollar un Plan Local de Salud para conseguir una ciudad más
saludable. Existían barrios con marcados determinantes sociales que
condicionaban un deterioro importante de la Salud Comunitaria. Nuestra Asociación
para la Defensa dela Sanidad Pública (ADSP) organizaba año tras año jornadassobre Desigualdades Sociales y Salud y así lo evidenciaba.
¿Cómo empezar? Estaba claro, como en tantas otras historias ya
estaba inventado. Existía RELAS (Red Local de Acción en Salud) y estaba
perfectamente elaborado y diseñado por la Consejería de Salud de la Junta deAndalucía. Se trataba sólo de seguir este método. La partida era complicada porque la
cultura saludable, incluso en el Servicio Andaluz de Salud, no es nada habitual. Lo primero consistió en transmitir la dimensión de este
proyecto al propio Ayuntamiento. Un acto plenario docente sobre los conceptos básicos y las posibilidades que
tiene la Acción Local para mejorar la salud de la población fue la clave. El
pleno municipal por unanimidad se adhiere al RELAS. Un curso de formación dirigido a personal
técnico y a la ciudadanía en general era fundamental para conocer de forma
colectiva nuestros propósitos.
Se decide comenzar por uno de los barrios más castigados por los efectos de las políticas de austeridad con el sector público que decidieron políticamente desde los gobiernos centrales, La Viña, que además tiene un fuerte sentimiento comunitario. Si miramos para atrás creo que no es osado concluir que ha merecido la pena. Se han organizado asambleas en plazas, jornadas de participación ciudadana para transmitirnos los problemas y su priorización. Se ha culminado el Plan de Salud de la Viña y se ha presentado en sociedad en una Fiesta popular, de nuevo en una plaza céntrica del barrio. Los éxitos de estas convocatorias nos demuestran que algo está cambiando. El Grupo Motor, constituido por técnicos y técnicas municipales, del Distrito Sanitario Bahía de Cádiz/La Janda, de la Delegación Territorial de Salud, del Centro de Salud El Olivillo, de recursos educativos públicos así como una amplia representación de los movimientos sociales más activos, ha resultado decisivo para conseguir estos logros.
La extensión al resto de la
ciudad era imprescindible y así ha sido. Se han vuelto a organizar cursos de
formación en RELAS, se han constituido otros tres Grupos Motores y la
implicación masiva del personal técnico tanto municipal como de Salud,
Educación o Servicios Sociales así como una mayoría real del activismo social
de la ciudad nos ha mostrado que había muchas ilusiones y que requerían de una
coordinación de esfuerzos. Ésta es la situación actual, existen seis grupos de
Trabajo en cada grupo Motor: Educación, Vivienda y espacios públicos, Medio
Ambiente, Estilos y hábitos de vida saludables, Asuntos Sociales y los de
Morbimortalidad/Sistema Sanitario. La intensidad, la complicidad y el ambiente
general de todas y de todos en la elaboración de los Perfiles de Salud nos hace
estar rozando la euforia: nos reafirmamos en los sueños que se pueden realizar.
A la vez hemos comenzado a
trabajar en los Activos de Salud y en el propósito de realizar Mapeos de Activos. El objetivo final es un Plan de Acciones, varias de las cuales estamos ya en
fase de desarrollo real. Un sueño.
Tras mis inicios hospitalarios y asistenciales y mi trayectoria posterior, de lo que estoy muy orgulloso, me he reconvertido en otro sanitario más completo: reivindico la Atención Primaria, la Salud Pública y Comunitaria así como el concepto de Salud como algo mucho más allá que la ausencia de enfermedad. Más vale tarde que nunca. Ahora toca perseverar. Ojalá tengamos tiempo para conseguirlo: una ciudad de Cádiz más saludable. Para estos objetivos transformadores la labor que se puede hacer desde la Acción Local es una oportunidad histórica que no podemos ni debemos desaprovechar en aquellos municipios del cambio que así lo posibiliten. Además hay que trabajar con espíritu equitativo para luchar contra las desigualdades sociales que existen en muchos de nuestros barrios, es decir, sin que se queden al margen de las Acciones en Salud ningún sector con determinantes sociales negativos.
Cádiz,
a veintitrés de Mayo del Dos Mil Dieciocho.
Antonio
Vergara de Campos
Miembro del Grupo Motor del Plan Local de Salud de Cádiz
Asociación
para la Defensa de la Sanidad Pública
Dónde queda la atención integral desde A.P. hasta la especializada,la transparencia informativa y la investigación internacional respecto a la hipersensibilidad inmunológica alimentaria pediátrica? Desahuciados desde la cuna por todo el tinglado sanitario.
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